Las elecciones presidenciales de Bolivia, realizadas durante el domingo 17 de agosto, irán a una segunda vuelta con los candidatos opositores Rodrigo Paz y Jorge «Tuto» Quiroga, poniendo fin a 20 años de gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS).
De acuerdo al Tribunal Supremo Electoral (TSE) Paz, senador y representante del Partido Demócrata Cristiano, obtuvo el 32,08% de los votos, mientras que Quiroga, expresidente de la nación y abanderado de la Alianza Libre, recibió el 26,94% de los sufragios, estimaciones realizadas con el 90% de las urnas escrutadas.
El resto de la lista la completaron el empresario Samuel Doria Medina (19,93%) y el candidato oficialista Andrónico Rodríguez (8,15%). De esta forma, Bolivia irá a balotaje el próximo 19 de octubre, siendo la primera vez que ocurre desde la implementación del sistema en 2009.
La constitución boliviana establece que un aspirante puede ganar los comicios en primera vuelta si obtiene más del 50% de los votos válidos o al menos el 40% con una diferencia de 10 puntos porcentuales sobre el segundo puesto.
Igualmente, será la primera vez en 20 años que la nación tendrá a un gobernante ajeno a la izquierda o al MAS, que estuvo a cargo del territorio desde la llegada de Evo Morales al poder en 2005.
El presidente de Bolivia, Luis Arce, aplaudió el desarrollo de la jornada, señalando que «hemos extremado todos los esfuerzos para garantizar un proceso electoral pacífico y transparente».
Sin embargo, durante el transcurso de la mañana se registró una explosión en el municipio Entre Ríos, cerca del centro electoral donde debía votar Andrónico Rodríguez.
En total, la participación fue de un 78,55% sobre un padrón de 7,5 millones de ciudadanos habilitados, según el TSE.
