Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, municipio del estado de Michoacán, México, fue asesinado durante una celebración por el Día de Muertos realizada la noche del sábado, 02 de noviembre.
De acuerdo a información oficial, Manzo se encontraba en una ceremonia con velas como parte de las festividades en honor a los difuntos, cuando un sujeto desconocido lo interceptó y le disparó siete veces.
La situación generó pánico entre los presentes, quienes corrieron para intentar ponerse a salvo. El mandatario perdió la vida poco después en un hospital a causa de sus heridas, según declaraciones del fiscal general del estado, Carlos Torres Piña.
Por otro lado, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, señaló que el asesino de Manzo fue abatido en el lugar de los hechos y que otras dos personas presuntamente involucradas en el delito fueron detenidas.
Omar García Harfuch, secretario de Seguridad de México, aseguró que se encuentran investigando para esclarecer el caso y que «no habrá impunidad».
El crimen también desató una serie de protestas que derivaron en ataques contra varias instituciones, incluyendo el Palacio de Gobierno de Michoacán. Los ciudadanos exigieron la renuncia del gobernador de la entidad y de la presidenta Claudia Sheinbaum, cuyo plan de combate contra el narcotráfico fue criticado en reiteradas ocasiones por Manzo.
«Si ella cree que va a detener a los delincuentes sin un disparo, y se van a entregar, pues que ya lo haga. Y créanmelo, si ella lo logra, lo más pronto posible yo presento mi renuncia», declaró el ahora ex mandatario en su momento.
Con información del New York Times.







